lunes, 18 de abril de 2011

AMIGA


Fantasiosa, ilusionada, engreída, encantada
de recorrer tus recovedos...
En un enigma, pasatiempos de mis días
podía estar yo fundamental pues me
atraía las escaleras, sala, comedor y cocina;
hasta mi recámara compartida.

El zaguán de mi niñez esplendorosa
humildad; no había postigo la cuál
permitiera una travesura mas, de aquellas
que en mis veinticinco primaverales años
hubiera podido cometer.

El tercer piso me acompaña siempre
con mis habanos hasta consumirlos y
convertirlos en pitillos....Y en el humo que
desfogo te vas tal cuál pensamiento mío...

De algún modo habrá para compartir solo panes,
pero es mi casa, mi refugio, donde me acuesto,
desvanezco, duermo y me levanto con tranquilidad;
sin ninguna mirada desatante de nadie.

Insisto es mi casa, mi territorio que me ha visto
vagabunda algunas veces y otras fugitiva por no querer
reconocer mis altanerías, por no querer aceptar
mis equivocaciones.

...Y me has visto rebozante, solozando, depresiva,
preocupada y enfermiza. Me has regocijado en tus
brazos en mis triunfos y derrotas...

Tus paredes me conocen tal cual,
tus matices me celebran mis parrandas
y tu puerta ha abierto mi suelo y mis
subsuelos; conociendo cada parte mía.
Morada mía, tu guardas con celo mis poemas,
pensamientos, cuentos, moralejas y ensayos en cada
ángulo donde me haya podido sentar...Y soy feliz,
feliz, feliz si hoy tengo nada mas que mi confortable hogar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario